Un Redactio más

sábado, 1 de marzo de 2025

La isla del Tesoro

El País de la Piel de Toro 


    Madrid 2/12/2023


     La isla del tesoro.

       852 palabras.


Una mañana clara y limpia del mes de julio del 2018. Me percate que al lado del contenedor de reciclaje, se encontraba apilada y recostado en unos de su lateral una fila en alturas de diferentes tamaños y colores de libros, creo recordar unos treintas ejemplares, estuve seleccionando algunos para llevarlos y leerlos en mis descanso. Encontré dos ejemplares repetidos en diferentes formatos y ediciones de diferentes años de "la isla del Tesoro"  me pareció tan juvenil, que cogí uno, para regalarselo a la sobrina de once años. A la hora salí a buscar el otro ejemplar para otro sobrino, pero ya no se encontraba en la menguada fila de libros. Me volví con ese amargo sentimiento de no haberlo agarrado  antes los dos vademécum, llegué a casa y lo dejé en la repisa de la estantería hasta que fuéramos para su casa en meses posteriores.  La mañana siguiente, un Domingo, al pasar por la habitación y ver el tomó, me pregunté, por qué no lo leía yo antes, pues me sonaba el título como de película, quizás la hubiese visto en mi infancia.  Agarre el pequeño ejemplar lo metí en la mochila, para empezar a leerlo el lunes, en el metro, en el trayecto para el    puesto de trabajo. Pasaron varios días en la mochila, hasta que me di cuenta del pergamino y empecé a leerlo, desde  la primera página me enganchó la alucinante aventura novelesca. Tarde tres días en leerla, me gustó tanto que me costó depender el tomó, cuando en asadajo presente se lo entregue a la sobrina, que lo acepto encantada del obsequio, leyendo el volumen en días posteriores, gustando mucho su lecturas como me indico al mes siguiente durante una visita familiar. Después de la pandemia del COVID-19, en primavera del dos mil veinte, coincidir con Gabi, un vecino lector de novela policiacas y de terror, al intercambiar nuestros gustos literario, recuerdo que le comenté, que me gustaría tener el libro " La isla del tesoro" pues era un clásico, para tenerlo en el mueble librería del salón; al entregarle un paquete que le vino a su nombre del remitente " todocoleccion" una aplicación de ventas de libros de segunda mano.  Amablemente se ofreció a buscarlo en la aplicación con precios de tres, cinco, seis euros. Pero no te merece la pena, en casa del libro, nuevo a estrenar lo tienes por cinco euros, me lo busco en su web. Ok gracias, respondí, un día de esto al medio día, me pasó por la de Alcalá. Seguí con mis menesteres, y mientras tanto llegó un ansiado fin de semana primaveral del dos mil veintidós, nos escapamos al pueblo, aproveche ese viaje en llevar unos cuantos libros leídos durante todo el año pasado, al colocarlo en la estantería metálica provisional, apareció un libro una edición del dos mil, que no me acordaba que lo tuviera, pensé que sería un ejemplar de mi hijo, seguro, pensé y miré la primera página, ahí estaba la fecha escrita en lapicero cuando lo leí, 19/6/2019, osea  me lo leí dos veces,  el que regale a Teresa,  me pareció vivir su contenido aventurero  más familiar. Pues ya no lo compraré en la editorial. Y pasaron los meses, entramos en otoño y sin darnos cuentas llegó la festividad de todos los Santos, y todos los días intercambiamos puntos de vista literario con el nuevo vecino, y un dia de estos a finales de noviembre, Gabi apareció como siempre por la puerta acristalada, venía sonriente y con algo debajo del brazo, llegó hasta mí, y me mostró el envoltorio transparente de plástico duro, en su interior se encontraba una edición coleccionable del libro " la isla del tesoro" de tapa dura y lo más increíble el precio de salida de la colección, un euro con noventa y nueve céntimos, a lo que Gabi respondió mas barato imposible, pues mañana antes de entrar, como pasó por varios kioscos de prensa, lo comprare, le respondí, y desapareció, al entrar en el ascensor dando un 'hasta luego. A la mañana siguiente pasé por varios kioscos, pero estaban ya agotadas las existencias del primer libro, y el vendedor me aseguró que lo tenía pedido desde hace unos días, pero que no se lo llevaban. Automáticamente cogí el móvil, abrí el WhatsApp, busqué el contacto de Gabi y escribí, pidiendo que si me lo podía encargar el primer libro de la colección en su punto de venta, pues los del barrio ya no lo tienen a la venta, minutos después recibo la respuesta con un oído cocina, sobre las trece y cincuenta del medio día, apareció por la puerta sonriente con el plástico envoltorio del libro y me lo entregó, y le di los dos euros, aparte de darle las gracias. Ya en casa se lo enseñé ai hijo abriendo el envoltorio, una vez revisado cogí el tomo y lo coloqué en la repisa de la estantería librería del cuarto azul, junto con otros ejemplares que se leyeron dando la máxima puntuación por su contenido literario. Ya le puedo regalar ese libro al sobrino. 



Enrique Manuel Hidalgo para El país de la piel de toro.