El Homenaje

R.N.E.

No es un día cualquiera

C/ Roc Boronat, 127

08013 Barcelona

Mi Pueblo 14 diciembre 2007

Aprieto firme mi mano, hundo mi arado en la tierra, hace años que llevo en ella, como no estaré agotado. Mi sudor hace surco y yo hago surcos a la tierra sin parar,vuelan mariposas, cantan grillos la piel se me pone negra y el sol brilla, brilla, etc.

Estimados doctor Pardo:

con este estribillo, que le dejo, haber si usted lo encuentra, esta canción, que se la dedicaremos a todos los labradores de cada rincón de este Mundo. Gracias a estos medios de Radio televisión o internet. No se encuentran fronteras, que el ser humano, pueda acotar.

Se la dedicaremos a ellos y a todos aquellos, que todos los días se levantan al alba. Clamando al cielo el Pan Nuestro. Pues gracias a ellos, hoy en día la humanidad siguen mirando a los cielos, clamando las buenas cosechas, que hombres y mujeres, luchan al día, día. Como los anteriores antepasados ancianos. Que tuvieron como enemigo numero uno, cualquier fenómeno meteorológico.

Sin estos ancianos antepasado, la agricultura no hubiese empujado hacia delante a la ganadería, si ella, el comercio, estaría dormido, la construcción olvidada, la industria paralizada y la siderometalúrgica, pasada de moda. Y todas las ciencias sin cultivar.

Si para vosotros, campesinos, todos los que de sol a sol, os dejáis que vuestro sudor corra en vuestros cuerpos fatigados, produciendo surcos en vuestra Alma.

Si ha Ustedes, que no renunciáis, a vuestros orígenes, si, vosotros, que saciáis el hambre, pero por torpeza nuestra, no toda como deseáis. No es culpa vuestra, si no, otros intereses.

Vosotros labradores, que día a día, año tras año, pedís al Rey de los Cielos agua a su debido tiempo, viento templado y calmado, nieve copiosa, el granizo que no se deje sentir, las heladas breves y el Rocío hay el Roció siempre.

Yo no tengo vuestro oficio, pero sé antemano, como se comporta la hostilidad en vuestros rostros y vuestros enemigos no os dejan una buena reconciliación, con la tierra que labráis.

Siempre a vuestro servicio y hasta la próxima siembra del tocino.

El País de la Piel de Toro