Un Redactio más

lunes, 12 de febrero de 2018

La Muerte

El País de la Piel de Toro

El que se cree rico en esta vida, está soñando, pues cuando la muerte le despierte, sabrá de su gran error









                                                             Madrid 19 enero 2018



No deja de sonar el celular, el Wappsat, cada dos por tres me avisa, con su inconfundible tono que le puse. Me encuentro petado de mensajes y videos, algunas veces, como no me da tiempo a verlo todos, lo eliminó, casi todos lo que me mandan del grupo son videos de guarros.

De mi reciente llamada de nuevos amigos, no quería, pero Moisés insistió en meterme en su grupo, al fin lo acepte, son de distintas nacionalidades, hispanoamericanas, que algunos como mi conocido, trabajan en España, otros en distintos países de habla hispana.

Ante de eliminarlo uno de ellos me llamo la atención, se veía un frondoso paisaje selvático, abrí el video, unos minutos en epera, para su completa descarga, listo ya para verlo.

Un escenario de selva apareció y fue acercándose a un muchacho entre unos quince a dieciocho años, se encontraba semidesnudo, amordazado con un pañuelo atado atrás, en la nuca, impidió cualquier salida de sonido, tan solo unos gemidos.

Estaba tumbado boca arriba, y las manos atada detrás de su espalda. Con una mirada triste y fija expresiva de terror, miraba al que le estaba grabando.

Atendiendo también a lo que relataba su verdugo, otro individuo, que no dejaba de decir que no eran más que sicarios, y maldecían todos aquellos el simple hecho de entrar en una de su finca o hacienda, de un lugar de Venezuela, para robarles.

Quiso demostrar que la maldición, corriera por los ojos de aquel muchacho, como si la muerte que estaba a punto de ocurrile, tuviese poder para aquellos que estaban viendo el video. 



Como si fuera una advertencia de bandas latinas, después de su charla amenazadora, se vio un cuchillo y la mano que la portaba, agarrando una oreja, como si fuera espigas de trigo, se la  segó.

Repitiendo el mismo movimiento con la oreja izquierda, unos hilitos de sangre salían de su corte, mezclándose con el barro del suelo. Unos gemidos y unas palabras, que no pude entender, salían de su amordazada boca.

La verdad que pensé que se tratara de algún truco de magia, cómo nos están circulado por YouTube. Eso quise ver, no quería que mis ojo vieran que se tratara de algo más serio.

Minutos después la misma mano apareció frente a la cámara, portado un gran machete, de los que se usan en la selva para cortar, cualquier rama o arbustos que impiden el paso a las persona.

Se vio como su gran hoja, de un golpe en seco descanso en su garganta, llenando de sangre su cuello, en borbotones hacia arriba, a continuación otro golpe en seco en su garganta, el muchacho quiso incorporarse dando la espalda a su asesino.

Como si quisiera incorporarse por la falta de oxígeno, esta vez le pusieron boca abajo, acto seguido la mano ejecutora, dejo caer su hoja de la muerte en su cuello repitiendo una par de veces, el desplazamiento del machete en un arriba hacia abajo. 

Los golpes no fueron tan brutales, con lo cual el despojo del muchacho tuvo que sufrir en su agonía, su fin llegaría segundo después, cuando ya todo acabaría para él.

Otro golpe del machete, me salió el más alto insulto, como si le fuera una voz ejecutora, pensé que le afectaría  mi maldición. Su intención era decapitarlo, como si su cabeza fuera un trofeo de caza.

Pero lo único que le produjo al cadáver fue una carnicería y de sufrimiento del muchacho, no podía creerlo estaba contemplando un asesinato y no quería ser cómplice del homicidio.

No sabía cómo actuar, aunque fuera a tantos miles de kilómetros, eso era un asesinato, aparte de un ajuste de cuentas, si juicio, sin defensa y lo peor que ese individuo se tomó la justicia por su mano, sin esperar a ningún veredicto.

Entonces recordé que guardaba desde hace una par de años, una tarjeta de la policía del grupo participación ciudadana, llame varias veces al número, nadie me atendió, marque otro número, este era un teléfono/Fax.

La tecnología, me brindo otra oportunidad desde mi celular, acedia a Hotmail, un correo electrónico gratuito, puse mi clave, para acceder a mi correspondencia, enviando la posible denuncia.

También lo mande a una cadena de radio autonómica, para delatar y revelar mi malestar por este tipo de actuaciones. Las fuerzas y cuerpo de seguridad del Estado, al día siguiente me mandaron, por vía electrónica, la respuesta a mi denuncia.

Unas frase tranquilizadora y animosa, me indicaban que otros grupos de Agentes, investigaban todos estos crímenes que circulan por la Red de Internet.



El día 20 me visito el administrador del grupo, le recrimine y amoneste, aconsejando que no me mandaran estos tipos de video, y por qué lo enviaron al grupo, lo que tenían que hacer era denunciarlo en su País.

En Ecuador u otros países latino, me dijo, que no se podían denunciar, que a los delincuente, que no tiene plata, lo devuelven a la calles para que otros delincuentes o la misma policía, ejecuten al reo, por la pasividad de los jueces.

Si quieres sobrevivir allí, lo mejor en no mirar, o irte por otro lado, la vida humana no vale nada, y menos si no tienes dinero, los presos con dinero el estado si les meten en la cárcel para, sacarles los sus ahorro y a los que no lo sueltan.

Y si caen otra vez en las garras de la policía, y si han visto que lo han detenido varias veces, ellos mismo lo quitan del medio, para no tener más marrones, con los jueces, me contestó, visto de esta manera, que pena que el chicle no dieran con estos tipos, pensé en los delincuente y asesinos que nos rodean en España, que suerte tienen.

Mi amigo continuó, allí, por cincuenta euros, te asesina y es más, tu que vas con traje, eres carne de caños, piensan que tienes dinero, y te asaltan para robarlo y si no lo tienes te  matan.

Ya por eso Fidel Castro, Hugo Chávez o maduro u otros van siempre con chandal, será para que no le asalte, jajaja, le respondí. Pues lo que tendrían que hacer es no tener tantos hijos para después verlos morir injustamente por algún tipo de robo o hurto, para tener algo que comer.

Allí hay tanta pobreza, continuo Moisés, que se matan entre ellos, es otra manera de vivir, sin meterse el lío, y si eres un chivato sabes que tiene precio tu cabeza.

Mirando a otro lado, si ocurre algo, lo mejor es salir cuanto antes, así que aquí, los delincuentes o asesinos, viven mejor, dar gusto delinquir, me lo dejo caer.

Ósea tan calientes que soy en temas de procrear, o del Reguetón, y a la hora de matar o asesinar sois fríos de cojones, como algunos individuos del Este, le respondí.

Re: Denunciar un asesinato




 
jue 18/01, 14:53


















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