El Jamón

http://www.museodeljamon.es/madrid/

Madrid-2-5-2014.

En los años ochenta, a principio, por mediación de un estudiante español, que se fue a Inglaterra a cursar, sus estudios, cuando vino en tiempo de vacaciones. Me comento, que sus compañeros en la clase, se creían que los habitantes del País de la Piel del toro, estábamos todo el día, vestido de flamenco y torrero, para festejar todos los días del año.

Que nuestra alimentación era, de Jamón y queso, no iban mal encaminado en lo de la alimentación, una buena tabla de un buen queso manchego o jamón al corte, por ejemplo un buen Ibérico, creo que es lo más soñado, en los habitante de este País, pero muy cara la la receta alimentaria. Algunas ocasiones contadas con los dedos de una mano.

En lo del primer punto, parece ser, que ellos los guiris, de la Isla, se creen o se creían, que no trabajábamos lo suficiente, puesto que nos veían todos en la corrida de toros, o festejando el Olé, Olé.

Cuando vuelva otra vez, le dije:  que de mis partes, les digas, que ellos son unos sibaritas, vestido de bombi, dejando de hacer para más tarde, el trabajo, en la hora de su querido té.  Eso que no probaron nuestro ¡ CHATO

Alguno de Ustedes ¡ Gustan!

Este mes pasado, abril del 2014;tuve la suerte de encontrarme con un ingles, que estaba enamorado de este País, el de la piel del toro, que le gustaba mucho visitar los museos, sobre todo el del Jamón, jeje, sonreí.

Celebre establecimiento, que yo frecuentaba a finales de los años queridos, de los ochenta. Desde estos párrafos, un caluroso homenaje a este Museo, por sacar lo mejor de lo nuestro, sin salir del país.

Debo recordar, que es, un buen locutorio del pasado siglo y este, para conocer gente y chatear, ya veis,  el chato era primordial, y ante que las nuevas tecnologias, inventaran el comunicarse con otros, como por ejemplo el wasap,  el chateo, se invento en este País de la Piel del toro. ¿ será que otros paises se siente a gusto con el nuestro, e intenta copiarnos en todo? 

Dando a conocer nuestro producto Estrella, como es el jamón, tantos a personal extranjeros como a personal nacional; es curioso como en los diccionarios enciclopédicos,( José Alemany) de 1933, da como definición al Jamón; como producto de salazón, y el de Espasa del año 1987, lo define como carne cruda de la pata del cerdo. Olvidándose de lo nuestro, lo culinario. Tan solo se recuerda en Googles, en Wikipedia, lo reconoce como marca Española.

También debo renombrar. Inglaterra, como York, hervido, jamón, alimento que se le da con mucha frecuencias, en los hospitales, en casas particulares. Un buen lacón, volviendo otra vez a nuestras fronteras, jamón expuestos alta temperaturas. Muy apreciado entre los habitantes del país de la piel del toro, ( Spain, España).

Pero hablemos del Jamón, ese ritual y sus resultados, que atraparon a Emperadores, como cuenta la leyenda que a Carlos I, Rey de las Españas, desde Montanchez, provincia de Cáceres en la vieja Lusitania.

Le obsequiaban con grandes jamones, y derivados del cerdo ibérico, hasta Yuste, donde fijo su residencia final. El ritual empieza como saber cortar el jamón, en finas lonchas que al paladar, no le disgusta su aroma, añejo y serrano, sin masticar a penas, se deshace.

No se si llegara para mañana.

Recuerdo de pequeño, como en las casa de los pueblos, en la cocina, entarimados de los pasillos, o en habitaciones frescas, colgando de las anchas vigas de madera, jamones y paletillas, reservándolos para aquellos miembro de la familia, con la salud delicada.

También es excelente medicina curandera. Hoy en día a que los precios han caído, por la máxima competencia en fabricas y almacenes. El jamón ya no es un producto, caro o de lujo, como en otra épocas.

Un jamón de bodega de más de 12 mese de curación, entre 6 o 7 kilos, no ronda los 50 euros, cuesta de media menos que una bacalada, de tres kilos. Dicho producto en salazón en años anteriores era el sustento de muchas familias.

Es también otro producto estrella, en el País de la piel del toro, pero volviendo al jamón, depende todo ello de la alimentación, que tuvo el animal. El de Bellotas que no tienen grasas a penas, los verracos extremeños, que pactan por las dehesas.

O lo de la raza blanca, traído por los americanos, en la mal llamada peste porcina, que colocaron a su cerdo hacia otras exportaciones, de jamones.

Por ejemplo, en nuestra casa cada ciertos mese, compramos un jamón, el nos facilita, en las cenas,o meriendas, unas agradables veladas alimenticias. Cuando llega su fin el hueso es serrado en diferentes trozos, entre 5 a 10 cm.

Para seguir aprovechando, se hace unos excelente caldos, que en sopas, con pasta ( fideos ) se degusta un buen cocido, base de nuestra alimentación.

Y desde aquí me dirijo a Usted, con este lema: El Jamón es lo más sano, pruébelo y verán como repiten otra vez.

El País de la Piel de Toro