El País de la Piel de Toro
Encontrando en la limpia acera, algún que otro regalo de
sus canes, pena es no los enseñan a usar los dueños desde pequeños, al inodoro,
como vi algún que otro video en YouTube, quedándome flipado, con esas
eminencias de mamíferos.
Madrid 6/3/ 2018.
1.413 palabras
No tengo nada en contra con los animales mascotas
mamíferos de ciudad, como puede ser “el fiel amigo del hombre”.
Es tan fiel que sus necesidades fisiológicas, no
la dejan hacerlas en casa, solo en la vía publica, para que otras
personas ajena a su familia de estos seres relacionales e irresponsables.
Las pisoteen cuando hay poca luz en la Aceras, desde que
estoy de conserje, no paro de limpiar la acera de estos excrementos, sólidos o
líquidos, que dejan sus dueños a escasos metros del portal de la vivienda.
Algunos de sus dueños no son capaces de recoger las
inmundicia que dejan sus queridas
mascotas, o como se denomina en castellano puro, “no le salen de los huevos
recoger las mierdas que dejan sus perros”.
Pero si los pillas infraganti, los que tienen una pizca
de educación los recoge, otros te pueden buscar un desagradable enfrentamiento
con amargura del día.
Como recuerdo este pasado mes de diciembre del 2017, la
primera semana, sobre las siete de la tarde aproximada, ya noche cerrada.
Estaba charlando con Raúl, un vecino de alrededor del
barrio, cuando apareció este gran y viejo animal de dos piernas acompañado de
su fiel amigo de cuatro patas.
A escasos metros de nosotros, su fiel amigo, se
encontraba indispuesto, en materia residual, tuvo que defecar ,
obligatoria mente a medio metro de la arqueta del árbol, ¿a no tener
conciencia el animal?, lo desarrolló en el sitio más perjudicado para los
personas.
Tanto Raúl y yo nos miramos, empezó diciéndole al caballero
que con un simple tirón de la correa, le hubiese conducido al registro de agua de lluvia del árbol.
Obligando a su Can ir del medio metro, la separación del rebaje en la acera donde se
encuentra el pequeño plátano de sombra.
Comentandole, otros
dueños de perros los acostumbran evacuar a sus animales en este lugar. Quedó
la cosa así, el hombre, una vez
terminado su perro de expeler, miro de un lado a otro.
Percatandose, de que le estábamos observando, sin prisa,
sacó una bolsita negra, recogiendo el excremento, y restregando la mierda por
la acera, una vez recogida la caca.
La bolsa la depositó en el registro de lluvia de la arqueta del árbol. Con ese
gesto Raúl se encaró con el propietario, acusándolo de guarro y vergonzosa, su
actitud.
Puesto a escasos metros del lugar se encuentra en la farola
la papelera. Entre riñas y riñas, se llegó a los insultos del dueño del
mamífero, Raúl se defendió con más adjetivos.
El caballero
amenazó con llamar a la Policía, llame usted, dijo su dialogador,
¿haber quien lleva la razón?, dijo un acalorado Raúl, a pesar de los 7 grados
centígrados en ese momento.
Vimos al hombre teléfono en mano, y en menos de 10
minutos un coche de la policía, apareció reduciendo la marcha y mirando el
lugar donde nos encontrábamos.
Ya eran las ocho menos diez, cuando pasó el coche, sí que
el caballero le parara y Raúl, preguntó al individuo, ¿si tenía pensado en
parar al coche o no?
Es ya tarde y este hombre, refiriéndose a mí, se tiene
que ir a su casa, así que de esta manera yo desaparecí de la zona, y Raúl se
marchó.
No pasando de un injusto berrinche por parte de los dos,
y una falta muy grave de respeto hacia
la sociedad pública de este fulano.
Pasaron los días, un lunes por la mañana, me encontré
toda la acera de la calle, manchada y pisoteada de heces caninas, ¡Ay que
joderse!, exclamé, no me lo puedo creer, como la gente de este lugar, algunas
personas, no tienen cuidado y no ven los zurullos de mierda, en la acera.
Parecen que tienen sus zapatos imanes, a mí también me
ocurrió alguna vez, se suele decir que pisar una mierda es síntoma de buena
suerte, a lo mejor los viandante, lo
hacen para comprar algún décimo de
lotería.
Recuerdo comprar alguno
que otro décimo de lotería, al pisar esta suciedad,
hasta que averigüe en un libro lo referido era la a la boñiga de caballo, con relación al
teatro.
Ya en enero, desde los cristales de la gran puerta, vi a
un chico joven parado sujetando una correa, donde llevaba a un cachorro de Pastor Alemán, imagine que algo estaba ocurriendo y Salí, hacia la calle, el joven
se alejaba y me dejaba la mierda de su joven perro.
Llamé a voces, me miró, y le dije que esto de la acera
era suyo, con el dedo en negación me dijo que no, y se fue haciéndose el listillo.
Lo recogió mi compañera que en ese momento salía, a
limpiar la puerta, bolsa en mano recogió la caca, echando después un cubo de agua en la acera.
Ahora la cosa está más tranquila, como ya son los días
más largos, si pasean con las mascotas por las aceras, a temor de que les
pillen y les pongan la cara colorada, algunos elige recogerlas.
Pero cada vez que me encuentro una o varias de ellas, en
la proximidad al portal, cámara en mano del celular, fotografió y Twitter con
el #Hashtag Madrid Limpio, de @LíneaMadrid, lo subí a la Red Social.
Haber se de esta manera también el ayuntamiento se implica, y obligan a estos sujetos a recoger
las mierdas que dejan sus queridas mascotas en nuestras queridas y limpias
aceras de esta ciudad.
Ya que tú como persona cívica, no dejas que tu mascota, defeques con sus orines y excrementos en la vía pública, lo más
razonables y con sentido común es que lo limpies.
No seas mala persona y #noalabandono de la mierda que
deja tú #mascota y #adopta una #callelimpiaporfavor, recogerlas siempre para que
otras personas #amigosdelperro no sufran resbalones y tontas caídas, manchando
su limpios zapatos o zapatillas.
Llevando los restos mal olientes de los #Doginstagram, lleguen a nuestras viviendas
de otros #amigosdelosanimales. Ya sé que con estas declaraciones, más de un
enemigo tendré.
No me importa, siempre lo he tenido, los tengo y los
tendré, sin meterme con nadie, tan solo intentar defender mis ideas, y soy
amante de los animales.
Por estos motivo no los tengo, porque me quitaría tiempo
para otras personas más necesitadas, yo que me crié casi comiendo tierra del
parque del barrio, sentándome en el césped, o de cualquier espacio al aire libre de Madrid.
Hoy es casi es imposible encontrar un centímetro cuadrado
limpio, esta todo contaminado de residuos sólidos y líquidos, que dejan vuestras
mascotas en las ciudades.
Os pido más Por Favor, en recogerlas, no seáis farsantes,
como la dueña aquella, del nueve de
abril de dos mil dieciocho, me dejo los sobrantes de su raza, de un Bóxer,
en el portal de la finca, justo en la misma puerta de entrada.
En primer momento lo negó, eso no era de su perro, dando
a entender que sería de otro animal de la casa, rectificando horas después a la
insistencia de algún que otro vecino.
La noche anterior pudiera ser, su novio pudo sacar el perro, con el negativo resultado que otro
vecino si verla, la caca la piso, restregando el zapato por la gran
alfombra.
Como veréis qué
eficaz y gratificantes es el tener
una persona que limpie la mierda de su mascota, suerte tiene que los del @ayuntamiento , no les toquen el
bolsillo , como a mí, pagando un alto impuesto de circulación de mi automóvil.
Por malgastar la vía publica y contaminar el aire, eso
dicen pero no hablan de otras contaminaciones, afectando a nuestras ciudades.
A lo mejor sería una buena idea de mandar unas
cuantas quejas, incluida este manuscrito
a #Bruselas, a ver si ponen coto a los ensuciadores de calles, aceras, jardines
y parques de nuestra ciudades, abrigando a su limpieza diarias.
Y recordar del #Noalabaandono de las cacas de vuestros perros en
la vía pública, los excrementos de #losamigosdelperro, os lo dice un amante de
las mascotas.
Si no los cuidas no obligues a otros los cuide por ti.
Posdata
Al cierre de este escrito, en el local de al lado de la
finca, esperando su nuevo inquilino, se inauguró días después una peluquería canina,
como si me fuese un castigo divino.
Ay los perros... que majetes!!!
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EliminarJajaja, si son majetes
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