El País del Toro
enrhid63@hotmail.com
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Madrid a 30 de abril de 2013.
Día
veintiocho de abril, se va a un gran hipermercado, con la intención de adquirir productos alimenticios, para las
siguientes semanas. Al pasar por los lácteos, cogimos unos mini yogures o petis
como indicaba el cartel.
Marca blanca, propiedad del súper, el precio,
un euro los doce unidades.
Se pensó que el híper, lo estaba
promocionando, el nuevo envase con el producto,
los metimos en el carro de la compra, con la intención de probarlo, en
posteriores días.
El día veintinueve, lo probo el niño, nos
advirtió que una etiqueta que develaba la marca y el producto, se encontraba en
el interior del pequeño envase, junto con el mini yogur.
A continuación se entro en un rifirrafe
domestico uno a dos, que el etiquetado era correcto, que con esos productos, lo
llevan dentro. El resto de la familia defendíamos, que podría ser un error, al
envasarlo, o no se dieron cuenta a
pasarlo por el control de calidad.
Podría ser un fallo del robot en la cadena de
distribución. Dije que es algo surrealista, que informen del producto
etiquetado no fuera visible, ante los ojos de las personas, no teniendo buena
visibilidad en el opaco enviarse del lácteo.
A no ser, que este fuera comestible, como se
dijo, lo probé, para salir de duda, el sabor no me gusto, y en la segunda
cucharada, revuelta con la etiqueta, escrita con tintas azules y roja, no era
comestible.
Casi me atraganto, con la bola del yogur y el
papel, entre arcadas al final lo puse pasar.
Dios quisiera que ningún niño pequeño, se comiera esto a solas. Dije
cuando paso la ultima cucharada, sin tragarme lo que quedaba de la etiqueta.
Seguimos con la polémica la tarde-noche, si
esto estuviese bien, como los demás productos lácteos, de la marca del híper,
no está envasado con la etiqueta dentro del enviarse, pregunte.
Y
quien dice esto, ¿por qué en los tarros de cristal y en los demás envase de
platico? ¿Y otras marcas, no lo
introducen el etiquetado?.
Al día siguiente día treinta, cogí los nueve
envases, más los tres vacíos con el tique de compra, marche con dirección al
hiper. No era el euro en cuestión, pues ya me resulto más caro el producto, en
coger el autobús ida y vuelta.
Si no para advertir de la anomalía, que
sentíamos en este producto, en el mostrado la persona que me atendió, en un
principio se extraño en la primera
imagen. Con más seguridad tenía que dirigirse con el responsable de los
lácteos.
En unos veinte minutos después, se recibió
una llamada, que los petis, el etiquetado estaban todos dentro del envase, que
el fabricante francés, lo muestran de esta manera.
Le comunique, que esto era la primera vez que
me pasaba, con un producto alimenticio, que no estaba dispuesto a comerlo, no
sabiendo los gérmenes que podrían llevar el papel del etiquetado más las
tintas, de las letra. Me devolvieron el euro
y me fui.
Ya lo dijo mi mujer, que en Francia lo vio,
cuando ella estuvo, en décadas pasadas. A mí, esto no me quedo muy claro, me
fui hacia el ordenador, accedí algunas páginas de asociaciones de consumidores, con la
intensión de sacarme de mis dudas. Si la
normativa era de esta manera.
Pero me tope, con otra zancadilla, no era
socio de pago, con lo cual esta consulta, no me lo podían resolver. Busque otra
organización de consumidores de la comunidad de Madrid, mande mi consulta o
inquietud, por correo electrónico, a la
espera de ser contestada.
Pensé que los franceses estaban más
adelantados que nosotros, en todos los ámbitos, me pregunten como era posible
que un producto que se introduce por la boca, no le den tanta importancia.
Claro que luego cuando haya una pandemía, le
echaran la culpa a otro país, como por ejemplo España, como ocurrió con los
pepinos. Lo único que me queda es denunciar desde mi blogger, este insólito hecho.
Parece que las demás vía administrativas, van
demasiada lenta o como dice el refrán si quieres que cante, venga el dinero
mucho antes.
En la página de FACUA, organización de
consumidores, sobre las etiquetas relacionada que es el medio de
control, encontré esto.
La normativa en relación con los etiquetados
de los alimentos, establece que debe ser legible y fácilmente visible. En este
caso como veis en la fotografía realizada en casa. No es legible y No es
fácilmente visible, pues se encuentra en el interior opaco del envase.
Según otro punto debe decir la verdad y no
inducir a error.
A estar la etiqueta junta con el producto.
Sugerir que podría ser comestible.
Hoy día 7 de Mayo recibo por correo electrónico,
otra consulta relacionada con el etiquetado, pero no vi que me respondieron a mi pregunta,
al final del correo un número de teléfono, me saco de mi aletargada lectura.
Llame explique mi inquietud, mi interlocutor,
me dijo que sería muy interesante que enviara un correo electrónico una dirección
que me dio, que en un principio era todo muy extraño.
Quede en enviárselo y también lo pondré en mi
blogger, como referencia a otras personas, que podría ayudarla en la nueva adquisición
de productos.
En relación a su consulta de fecha 30/04/2013, le informamos
que el etiquetado de los productos alimenticios envasados deberá
contemplar al menos los siguientes datos:
1. Denominación
de venta.
2. Lista de
ingredientes.
3. Indicación
cuantitativa de ciertos ingredientes.
4. Grado
alcohólico, en bebidas con graduación en volumen superior al 1.2%.
5. Cantidad
neta.
6. Fecha de
duración mínima o fecha de caducidad.
7. Condiciones
de conservación y utilización.
8. Modo de
empleo (cuando sea necesario).
9. Identificación
de la empresa.
10.
Lote.
11.
Lugar de origen.
Será obligatorio que figuren en el mismo campo visual:
·
Denominación de venta.
·
Cantidad neta.
·
Marcado de fechas.
·
Grado alcohólico, en su caso.
Todos los alimentos deben llevar una serie de datos informativos en
su etiqueta para que los consumidores sepan lo que compran y
puedan seleccionar mejor los productos. Leer el etiquetado de los alimentos es
imprescindible, pues permite por un lado conocer la fecha de caducidad y las
condiciones de conservación del producto; por otro, identificar los
conservantes y aditivos que se han utilizado; y por último, conocer las
características nutricionales del alimento y saber si contiene algún
ingrediente al que el consumidor pueda ser alérgico.
Para mayor información puede dirigirse a la Dirección
General de Ordenación e Inspección de la Consejería de Sanidad (Pº.
Recoletos, 14. Código Postal: 28001. Teléfono Higiene y
Seguridad Alimentaria : 91 205 22 82